En los últimos años, o más bien lustros, el verano se ha convertido en el enemigo a combatir. En este tiempo me suelen acaecer toda suerte de males: me veo obligada a cambiar de residencia, a dejar el frescor del campo para refugiarme en una suerte de zulo en el que uno, sobre todo en estos días calurosos, a duras penas puede respirar y, lo peor, la soledad se ensaña conmigo de tal suerte que, en ocasiones, llego a enfermar. Estoy pendiente, de hecho, de que mi médico vuelva de la playa para hacerme un examen a fondo: tengo el organismo del revés y la coordinación de antaño se ha trastocado en un caos en el que cada función biológica va por libre. Todos, excepto yo, se van de vacaciones y aquí apenas queda un alma con la que charlar o tomar una cerveza; y son lustros soportando lo mismo. Llevo una vida bastante solitaria, de ahí que la compañía de mis congéneres se me haga tan necesaria, sobre todo para alguien tan sociable como yo. Ayer estuve con R. durante un par de horas: llegué a casa contenta y, para mi asombro, logré dormir más de ocho horas seguidas. La soledad, cuando es muy continuada en el tiempo, crispa. Hago balance de la última semana: excepto por estas cañas con mi amigo, apenas he estado acompañada durante unas pocas horas; y así no se puede vivir. Cuando residía en el campo, tenía la casa llena de telarañas y mataba bichos con los dedos; ni un sólo insecto llegó a posarse sobre mi piel para succionarme la sangre o inocularme veneno. He tenido, desde que estoy en la ciudad, dos picaduras muy molestas, de cuyas cicatrices espero librarme. Esta mañana, para evitar más estropicios, me he comprado en la floristería un concentrado de citronela —la planta, por lo visto, sólo se vende en primavera—, con el que de ahora en adelante dormiré cada noche. Sólo quiero que estos días que restan para que acabe agosto, además de la primera semana de septiembre, pasen rápido, muy rápido; a partir de ahí, creo que ya podré respirar tranquila.
16 agosto 2011 de 16:10 |
¡Que bonito!. Es un placer leerte…….¡de verdad!.
Besiñosssssss…
Celia
17 agosto 2011 de 3:10 |
Gracias, celi. Es un placer, como siempre, tenerte aquí. Besiños. 🙂
16 agosto 2011 de 16:21 |
Espero que el tiempo que queda se te pase rápido. Es una faena que tengas que pasar los veranos sola. Un beso.
17 agosto 2011 de 3:11 |
En realidad, paso todo el año sola, pero es durante los veranos cuando más se agudiza la soledad, hasta el punto de herir. Gracias y un beso para ti también.
16 agosto 2011 de 16:57 |
Esperemos que agosto pase con rapidez y deje paso a un mes de septiembre lleno de promesas y esperanzas.
Un abrazo
17 agosto 2011 de 3:12 |
Promesas y esperanzas, ¡qué palabras tan hermosas, Mercedes!
16 agosto 2011 de 18:56 |
Zambu te mando una sonrisa (un abrazo no que hoy hace mucho calor y te dejo más acalorada aún) Espero que no se te haga muy duro este final de verano…LLegarán brisas frescas…verás como sí. Un beso
17 agosto 2011 de 3:13 |
El calor, coincido contigo, es insufrible. A la espera estoy de esas brisas frescas llenas también de estrellas. Besos.
16 agosto 2011 de 19:07 |
buen relato. el personaje contemporáneo, sitiado por obsesiones de protección y completud aislado en una soledad subjetiva y psicológia. bien representado. narrado con buen gusto y ligera nostalgia.
17 agosto 2011 de 3:14 |
El personaje contemporáneo, alejandro, soy yo. Éste no es un blog de relatos, es una bitácora, un cuaderno personal. Gracias por pasarte y por comentar. Saludos.
16 agosto 2011 de 19:09 |
La soledad puede no ser buena amiga, a veces… a mi gusta de vez en cuando, la soledad.
Sabes, Zambullida he escuchado que un amigo puede hacer tanto! el mejor amigo: Dios.
Que pase pronto el tiempo… si son tus deseos, todo lo mejor para ti.
Un abrazo!
17 agosto 2011 de 3:16 |
Sé, flori, que Dios es el mejor amigo, pero el hombre, a no ser que tenga vocación de eremita, necesita también la compañía de sus semejantes. Recuerda: ” no es bueno que el hombre esté solo”.
17 agosto 2011 de 23:48
Bueno tienes razón, por eso te decia que “a veces…” me gusta la soledad.
Sabes, lo que si me llama mucho la atención es que me parece que en tu país las personas son distantes, me explico, porque en donde vivo la gente es muy de hacer amigos y andar juntos… por eso creo que tu soledad me parece circunstancial, pero no se si me equivoco… son impresiones nada más.
18 agosto 2011 de 0:36 |
En España, la gente, en general,es bastante cordial, pero cuando se llegan a determinadas edades, flori, todos andan con hijos y muchos compromisos y resulta difícil hacer vida social. Vosotros, desde luegos, sois mucho más abiertos y hospitalarios.
16 agosto 2011 de 19:12 |
El tiempo va pasando, y debemos pensarnos pluma, que ligera nos lleva el viento, siempre a sitios mejores. Lo mejor, está por llegar.
Un beso.
🙂
17 agosto 2011 de 3:16 |
También soy de las que creo que lo mejor está aún por llegar, aunque se haga esperar. Gracias.
16 agosto 2011 de 22:30 |
La verdad es que la soledad no buscada es un poco como una condena,y a ti te gusta sentirte acompañada por que cuando hablas con amigos te relajas y te hacen sentirte mejor,pero la soledad te sienta mal ,pero si sabes utilizar la puede ser una gran a liada, cuando buscar encontrarte a ti misma,buscar que es lo que te motiva ser mejor y a sentirte mejor,pero cuando te sientes bien contigo misma es fácil no sentirte tan solo.
Pues hay gente que cuando estas con ella o te consumen la energía o te sientes más solo con ella que sin ella.
17 agosto 2011 de 3:23 |
Es cierto que uno cuando se siente a gusto consigo mismo, no necesita estar, a todas horas, rodeado de gente. De hecho, tanto mis momentos solitarios como el silencio me son indispensables. Esta soledad no buscada es cosa bien distinta; es, como tú dices, una cruel condena. Tendrá que ser así.
17 agosto 2011 de 17:00 |
La soledad obligada acaba con el ánimo de cualquiera. No me extraña que te sientas así. Y es cierto que el verano lo trastoca todo, horarios, comercios cerrados, …
Es para quitar el sueño.
Me alegro de que durmieras bien después de las cañas. 🙂
Saludos.
17 agosto 2011 de 18:19 |
¡Odio el puente del 15 de agosto!, no lo puedo evitar.
Después de unas cañas y, sobre todo, de buena compañía resulta más sencillo conciliar el sueños. Gracias, Alan.
17 agosto 2011 de 18:19 |
…eso Zambu! que en Septiembre, se decida aquello, (ya me acuerdo) y luego te pegas ese viaje al país vecino. Me alegra saber que durmieras anoche …
17 agosto 2011 de 18:26 |
Anteayer dormí, pero anoche apenas he descansado cuatro horas; no me tengo en pie. En fin…
Gracias por acordarte de lo de Aquello, muchas gracias tomae.
17 agosto 2011 de 19:11 |
NO sabía que la citronela auyentaba a los mosquitos. No te preocupes que el tiempo vuela y en cuanto te quieras dar cuenta estamos en otoño. Saludos
17 agosto 2011 de 22:11 |
Si por mí fuera, suprimiría el verano; es la única estación, para mí, que carece de encanto. Otoño, otoño, otoño ven pronto.
17 agosto 2011 de 20:56 |
Que el tiempo pase volando, volando, para que pronto llegue septiembre y puedas encontrar todo eso que ansías. Habrá que soportar lo que queda de verano y de horrible calor de la mejor manera que podamos. Ánimo, Zambullida, Un abrazo.
17 agosto 2011 de 22:13 |
Ya sabes que cuando quieres que el tiempo pase deprisa, éste se empeña en ralentizarse. Así que, como dices, lo mejor es aceptarlo, calor incluido, y pasarlo lo mejor posible. Un abrazo para ti también, Juana.
18 agosto 2011 de 1:21 |
Y PORQUE NO? EL TIEMPO PASA VOLANDO Y ESTAMOS EN LA MITAD DE AGOSDTO Y PRONTO EN SEPTIEMBRE, POR CIERTO ES UN MES MALO PARA MI, PERO ESPERO QUE PARA TI SEA LO QUE ESPERO QUE SEA, UN ABRAZO ZAMBULLIDA Y COMO SIEMPRE YA SABES QUE TODO TIENE ARREGLO.
18 agosto 2011 de 1:43 |
TAL VEZ SEPTIEMBRE NO SEA TAN MALO COMO ESPERAS Y SOBRELLEVES TODO CON MUCHA PAZ, ¿POR QUÉ NO? EN CUANTO A MÍ RESPECTA, MI FUTURO SE DIRIME ENTRE SEPTIEMBRE Y OCTUBRE.
TIENES RAZÓN, AMIGO: TODO TIENE ARREGLO. UN ABRAZO, JARAFUELINO.
25 agosto 2011 de 3:42 |
Querida amiga,
Luego del terrible calor que soporté en Disney y en Ponpano Beach, te comprendo perfectamente, la diferencia es que yo sufrí el calor en compañía y ahora paso un frío terrible en soledad, sólo con la empleada de la casa.
Hoy a medio día tuvimos un fuerte temblor, que se sintió en todo el Perú, Ecuador, Colombia y más fuerte en Brasil, ya que el epicentro fue en la frontera con Brasil.
Tu bitácora como bien la llamas es muy buena, como todo lo que brota de tu pluma, eres una gran escritora.
Hablando de estaciones, tu ya sabes que la que más me gusta es la primavera, estoy contándo los días que faltan para su llegada.
Cariños,
Maricarmen
25 agosto 2011 de 3:58 |
También yo tengo especial debilidad por la primavera, aunque también disfruto mucho del otoño. Las estaciones “intermedias” son mis favoritas. No sabía nada del temblor, sólo había oído lo del terremoto en Virginia ¡Ánimo, Mª del Carmen, mucho ánimo!
25 agosto 2011 de 16:43 |
Se ha definido millares de veces la soledad….
Nadie lo ha hecho con tanta frescura y con tan poco dramatismo. No obstante, me he sentido sola -como zambullida- en el corazón y sobre todo en el cuerpo exigente que no perdona ningún sufrimiento extra más….aunque la cabeza así lo disponga.
Desde aquí te reitero mi lejana pero sincera compañía, amiga prodigiosa.
Marisina
25 agosto 2011 de 23:16 |
¡Qué bonitas letras las tuyas, Marisa! Gracias a ti por tu compañia, gracias a ti.